La misma expresa el repudio de las organizaciones y referentes de derechos humanos, a la criminalización de la lucha del Pueblo Lenca, y del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras - COPINH - por defender sus territorios y el Río Gualcarque de la construcción inconsulta de una represa.
Antes de llegar a la Embajada, Nora Cortiñas, quien estuvo en Intibucá, Honduras, acompañando a la comunidad el día que se dictó la sentencia que condenó a prisión preventiva a Berta Cáceres, coordinadora nacional de COPINH, destacó que "la sentencia y todo el proceso de criminalización es manifiestamente injusta y arbitraria. Se condenaron a los tres dirigentes por tener poesías en su sitio web y llevar pancartas que decían 'El Río Gualcarque no se vende, se defiende! Y ahora, a Aureliano Molina, comunicador social de la comunidad, le quieren cambiar la pena también a prisión preventiva, por haber participado junto a mí y mucha gente de la comunidad, de una misa. Esto demuestra el grave peligro que corren los derechos de quienes defienden los derechos hoy en Honduras. Reclamamos al gobierno de Honduras que cese esta persecución y que deje en libertad incondicional a todas y a todos que hoy se están condenando injustamente."
Repudiamos la condena a dirigentes Lenca y a la defensa de toda la comunidad de Río Blanco de sus derechos
A
continuación, el texto completo de la Carta que empezará a ser
entregada el 3 de octubre, en la Embajada de Honduras en Buenos Aires.
Invitamos a quienes quieren sumar su apoyo, a enviar un mensaje a apoyamos honduras@gmail.com
Al Presidente de Honduras Porfirio Lobo Sosa;
A las autoridades del Ministerio Público, los
Jueces y Juezas del Poder Judicial y las y los legisladores de Honduras;
A los gobiernos e instituciones regionales de
nuestra América;
A los órganos de protección de los derechos humanos
en los ámbitos hondureños, regionales e internacionales;
A las empresas DESA y SINOHYDRO y sus respectivos
gobiernos y financiadores;
Por
medio de la presente, queremos expresarles nuestro más enérgico repudio a la
persecución y la criminalización siendo instrumentadas en contra del Pueblo
lenca, miembros de la comunidad de Río Blanco y los y las integrantes del
Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras, COPINH. La
misma tiene como único fin el poder consumar el despojo de sus derechos y
territorios, del río que les nutre de cuerpo y de alma, de su vida misma como
pueblo y comunidad.
Rechazamos
en especial, por su manifiesta injusticia y arbitrariedad, la sentencia emitida
por la jueza Lissien Lisseth Knight Reyes el 20 de septiembre, por medio de la
cual se le dictó prisión preventiva en contra de la Coordinadora Nacional de
COPINH, Berta Cáceres, y prisión con medidas sustitutivas contra Tomás Membreño
y Aureliano Molina. En un tribunal rodeado por policías y militares, los tres fueron
condenados en primera instancia por inducir a la comunidad a cometer actos de
usurpación, coacción y daños continuados en perjuicio de las empresas que, sin
consulta previa, han iniciado construcción de la represa Agua Zarca en contra
de su voluntad y vida. Es especialmente indignante saber que las pruebas
invocadas en su contra han sido las poesías que recitan, el canto que les anima
y las consignas que les brotan señalando que el Río Gualcarque no se vende, se defiende. Rechazamos de igual
manera, la nueva citación intimidatoria de la jueza interviniente, en contra de
la libertad de movimiento de Aureliano Molina.